Llevo mucho tiempo sin escribir,
puede que sea por ti,
o quizás por mí,
pero que importa eso.
Importan quizá algo las mil y un noches en vela cuando solo una risa tuya me hace olvidar todo lo malo,
o los momentos en los que hasta me faltaba el aire al escuchar a alguien pronunciar tu nombre,
aunque no fuera ni para referirse a ti.
Que no te volvieras al marcharme,
pero me buscaras a las semanas llamando mi nombre,
cuando tu cabeza controla lo que tu corazón quiere sentir,
pero no se lo permites porque no quieres que te lo vuelvan a destrozar,
y si,
eres listo,
no soy fácil de querer con mis cientos y miles de defectos,
con mis ganas de parar un poco el mundo cuando me miras,
de un café de buenos días
una cena en algún restaurante cutre de París,
pero qué más daría si estuviéramos tú y yo.
A todo esto,
ojalá algún día pierdas la cabeza por alguien como yo la perdí por ti.
miércoles, 26 de agosto de 2015
Ojalá curara el tiempo
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario